Conciencia sin Ciencia

Un hombre muy conocido por su intelectualismo y humor negro tenía sus reservas hacia el matrimonio y todo lo que representase un gobierno mediocre a sus ojos.

Seguía su vida de relación en relación como si tuviese 20 años. Nunca se casó, no le parecía algo de su talla quedarse con una sola mujer para fingir estar ¨enamorado¨ y establecerse. Algunas veces lo escuché expresarse y pude darme cuenta que era en su corazón una piedra, de hecho una roca muy rara de alguna montaña.

Le observaba detenidamente y la soledad en la que se encontraba era tan grande que se le notaba hasta en el cabello. Orgulloso ostentaba la frase de que era muy feliz así… solo y que no necesitaba a nadie para ser feliz.

Pocas veces tuve la oportunidad de hablar con este hombre, ya que siempre el decía algo sabio y ¨adelantado para que los demás estuviésemos callados, pasaba el tiempo mencionando a hombres que desafiaron a la sociedad con inventos y métodos científicos con los que eventualmente... blah blah blah. ya sabemos la vida de los genios y de los gobiernos desde los tiempos de la 2da guerra mundial. Acostumbraba leer y tenía una basta colección de fotografía y libros.

Un día lo vi desde lejos con una cámara fotográfica en la mano, disparando aquí y allá, parecía disfrutarlo mucho, la imagen que yo vi desde donde estaba era un poco graciosa, su cabello plateado se veía casi fantasmal y brillaba como nunca, el sol de media tarde le favorecía para las fotos que tomaba y sin siquiera presentirlo le convertía en personaje de ficción, la distancia entre nosotros se acortaba rápidamente porque yo venía manejando mi auto, el único que he tenido desde que pude comprármelo, ya está viejo pero sirve el motor. Me orillé y me detuve lentamente no muy cerca de él por cierto, bajé de mi auto y caminé lentamente hablándole al mismo tiempo,_ Orgulloso, cómo estás?_ dije._ Veo que no pierdes el tiempo,eh?

No _ respondió duramente, a mi me gusta tener pruebas fehacientes de todo lo que considero importante, qué no sabes que es mejor comprobarlo uno mismo que creer toda la sarta de sandeces que ahora dicen los que se creen inteligentes, ahora que con el uso del Internet, todo mundo se cree muy sabio., _casi no pude entender sus palabras estaba absorto viendo como le sangraba un oído pero él no dejaba de hablar, hablaba rápido y sin tomar aire, trataba de interrumpirlo para poder hacerle el comentario pero no me dejaba.

de pronto le grité!_Oiga!_ y como abruptamente comencé a hablar, a el sólo se le desorbitaron los ojos estaba a punto de regañarme y antes de que me dijera una silaba le dije, Se siente bien Don Orgulloso?

Sus grandes ojos grises rápidamente volvieron a sus órbitas, los brazos que antes sostenían la cámara, bajaron la guardia, la cámara cayó y quedó hecha pedazos en el suelo… lentamente ,como una hoja de otoño cayó Don orgulloso al ras de la tierra.

Las voces de la gente y los gritos de una mujer rompieron el duro silencio en mi cerebro, volví y tomé conciencia girando rápido a verlo. Agachándome lo vi., ahora estaba ante mí esa frente que antes era lisa por la falta de expresión, hoy se tornaba como una especie de despeñadero, se movía y se plegaba como arenas movedizas, el dolor era insoportable ya _grité, una ambulancia por favor, rápido.

Me arrodillé para levantar su cabeza y la mujer que lo atropelló venía hacia nosotros diciendo, él se cruzó!, no pude frenar., él salió de la nada, no lo vi.

Ella lloraba desesperada mientras yo veía las pupilas de mi padre apagarse como pequeñas luces, la muerte estaba arrebatándole la vida,

Le abracé muy fuerte y me dijo.,-Qué ha pasado?

le respondí., creo que te han atropellado, rápidamente y a su puro estilo me dijo sobresaltado,_ no es cierto yo no vi nada, dame una prueba de ello!.

Sin apartar sus ojos de los míos esperaba que yo no tuviese nada que decir, mas mi angustia crecía al ver que mis rodillas se empapaban de su sangre y él seguía pidiéndome una prueba.

La mujer destrozada por la escena me dijo _Tome, extendí la mano y le dije _ gracias.

puse con cuidado el trozo de tela en la cabeza de mi padre, mis manos temblaban por el impacto de ese terrible momento, entonces tome fuerzas y le mostré la sangre de su propia herida.

El sonrió al principio incrédulo, después desesperado, _ganaste _ me dijo,­_ me has dado una prueba de que estoy herido, no sabía qué había pasado,

Seguí una hermosa ave y luego un mareo me sobrevino y estaba en aquella banqueta, tirado como un trapo, no podía permitir que alguien me viera así, lo que hice fue levantarme rápidamente y seguir como si nada, creo que nadie me vio, verdad.?

_No podía creer lo que escuchaba, este hombre estaba a punto de morir y no se le ocurría nada, mas que pensar en su postura ante la vida, ante los demás. Vi sus ojos y conocí su corazón, afilado como una daga ,pero hueco, solo, sin Dios, lleno de nada y de todo, me dolió ver eso, le abracé y le dije., _padre yo te perdono y te bendigo, no temas ora conmigo un momento, pero él se comenzaba a ahogar con la sangre que subía por su garganta, le era difícil hablar, decía de pronto las palabras que nunca me dijo,_Hijo te amo, perdóname, si salgo de esto vamos a caminar una tarde,? de manera rápida, acelerada, hablaba ya sin orden en sus palabras ,ya no tenía fuerzas para luchar, luego inesperadamente lloró como un bebé, sollozaba y me apretaba las manos, de pronto algo suave y cálido, casi imperceptible, silencioso y lleno de paz, nos rodeó, entonces se hizo el milagro, dejó de llamarme por mi nombre, dej de poner atención a mi llanto y mi desesperación y dijo; Padre perdona mis pecados, me arrepiento ahora que se que moriré, fui un necio, fui un ciego, no entendí nada de esta vida, perdóname… no me dejes tengo miedo de caminar solo por ese lugar, sin ti no se a donde voy,

Jesucristo ven a mí Señor y llévame contigo. En instantes su cuerpo lastimado dejó de luchar.





Esas fueron las ultimas palabras de aquel hombre que fue mi padre y que al final de su vida logró arrepentirse y alcanzar la salvación en Jesucristo.



No necesitamos pruebas científicas o de otra índole, para creer que hay un Dios que nos ama y nos perdona nuestros pecados.



Jesucristo nos espera con los brazos abiertos al arrepentimiento y a la salvación

no dejes pasar la oportunidad de hacer la diferencia en tu vida y en la de tu familia.

Ama con fuerza y apóyate en Jesús y en su palabra que te dará sabiduría, nuevas fuerzas y Fe para mover montañas.

DtB.



Compartir en facebook |

2 comentarios:

Pikis! dijo...

mi comentario sobre esta historia es:
que el señor se tardo mucho tiempo en entender que necesita de DIOS y eso es algo triste.
pero lo bueno es que recibio a DIOS :)

WARRIOR dijo...

Hola Dianyx, sigue opinando, me agrada que pienses asi, ahora que te parece el joven que aparece en la historia?

Publicar un comentario



(c) 2009 TuSangrexMi.blogspot.com